Hola amigos de FPP

Si te dijera que me gustas, oirás de mis labios tech paktia”.

Si te dijera que me gusta el brillo de tus ojos, oirás de mis labios nech paktia pitlane mo ixtotolowan”.

Si te sientes afligido, te llevaría a mi mundo lleno de sabores, colores, texturas, olores, sonidos que se convergen en la fiesta del pueblo. Allí bailarías “ti mihtotis”, cantarías “ti tlakuikas”, reirías “ti witzkas”, o si prefieres un espacio más íntimo, podrías apreciar una cascada “kani yoli atl” escondida entre grandes monumentos verdes: las montañas. Mientras tus oídos se deleitan con un concierto natural musical y el viento acaricia tu piel…Como podrás notar, las lenguas indígenas son poesía y, más aún, son conocimientos que alivian el cuerpo y el espíritu. Son formas de trabajo, puentes hacia lo intangible. La diversidad lingüística es un tesoro que refleja la riqueza cultural de la humanidad y guarda un vasto conocimiento sobre las cosmovisiones y las tradiciones. A través de la lengua se transmiten historias, creencias y prácticas que forman parte del tejido social. Si alguna lengua muere, la identidad cultural se fragmenta y se debilita, y con ella las generaciones más recientes, que se desconectan de sus raíces, a menudo sin darse cuenta. ¡Leíste bien, estimado lector! Si alguna lengua se pierde, se pierde una parte irremplazable de la diversidad cultural del mundo.

Según la UNESCO, se estima que una lengua desaparece cada dos semanas. Una de las principales razones de esta pérdida es la discriminación por hablar estas lenguas en diversos espacios. Según datos del INEGI, un 8.2 % de la población indígena enfrenta este problema, además de otros factores como la globalización y la urbanización. La conservación de las lenguas indígenas es fundamental no solo para preservar la diversidad cultural, sino también para la resistencia y el empoderamiento de las comunidades indígenas.

En este contexto, en 7 regiones de México donde Fondo para la Paz trabaja de la mano con familias enteras, destacan las siguientes lenguas:

  • En Veracruz, en la Sierra de Zongolica, se habla el Náhuatl.
  • En la Costa de Oaxaca, el Chatino.
  • En la Chinantla de Oaxaca, el Chinanteco.
  • En la Mixteca de Oaxaca, el Mixteco.
  • En la Huasteca de San Luis Potosí, el Tenek.
  • En la Albarrada de Chiapas, el Tsotsil, principalmente, seguido del Tseltal.
  • En Calakmul, Campeche, se hablan principalmente el Chol, el Tzeltal y Maya, entre otras lenguas.